viernes, 31 de octubre de 2008

LA SANTA Y EL PIRATA.

Cuando el corsario de Tenerife Amaro Rodríguez Felipe , <> , obtuvo permiso de los dominicos para abrir la tumba de la monja María de Jesús de León Delgado , fallecida tres años antes, con la intención de trasladar sus restos a una nueva tumba , los
allí congregados se lleva -ron una sorpresa tremenda.El cuerpo de la religiosa estaba entero, fresco, rezumando sangre y un líquido que no cesaba de salir...
Pronto la noticia se extendió por la isla y, con ella, comenzaron a florecer los milagros entre la gente sencilla que invocaba a quien ya llamaba <>.Ésta había nacido
en El Sauzal el 23 de Marzo de 1648 y desde jovencita tenía inclinaciones religiosas, asombrando a los vecinos, por ejemplo, cuando iba por los caminos cargando una pesada cruz de madera.
Cuando ingresó en el convento de Santa Catalina, en La Laguna, fue conocida por sus virtudes por las más ricas familias de la ciudad, quienes entablaron relaciones con ella. Uno de estos personajes fue en el temido Amaro Pargo que, según contaba él mismo, hallándose en grabe peligro en una de sus correías piráticas por el Caribe, fue salvado por la intervención milagrosa de la llamada , quien interpuso su cuerpo entre Pargo y alguien que deseaba atrabesarlo con su espada. Este milagro hizo que el corsario fuese muy veboto suyo.
En la actualidad, cada 15 de Febrero las puertas del convento de clausura se abren para que el cuerpo incorrupto después de casi tres siglos.

1 comentario:

Beatriz dijo...

Hola michelle me a gustado bueno adios